Los folletos son una de las formas de publicidad escrita más difundidas y más efectivas para llegar al público. Están conformados por una o varias páginas que contienen la información de un producto o servicio que se quiere promover. La forma más común del uso de los folletos es la promoción de ventas y ofertas de productos. Los mismos suelen ser en colores llamativos y letras de cierto estilo que usualmente atraen la atención de público.
La forma de distribución de los folletos publicitarios los hace más prácticos que otros medios de promoción. Usualmente se envían por correo, se distribuyen colocando los mismos en los buzones, agregándolos entre las páginas de los diarios y distribuyendo en eventos relacionados con el producto o servicio que promueven, así mismo se entregan a potenciales clientes durante un acercamiento de compra venta, sus fáciles opciones de distribución los han hecho la forma más barata y exitosa de promoción de productos y servicios a gran escala.
Los folletos también se exhiben en dispensadores en toda clase de comercios y empresas, en donde están accesibles a toda persona, ya que por sus colores y sus diseños, en los que hay que poner especial detalle para que capte la atención del potencial cliente, atraen y pueden ser vistos hasta por aquellos que no han estado pensando en adquirir el producto o servicio que se vende, pero que a partir de un folleto, podrían interesarse en el mismo.
El diseño de los folletos es parte del trabajo de arte que realiza una imprenta, teniendo en cuenta la escala de colores que más atraen la atención del público, elaborando diseños novedos y textos interesantes que capten la atención y utilizando materiales acordes a la promoción que se hace. Algunos folletos están dirigidos a determinados segmentos y determinadas formas de distribución y se hacen de materiales de mucha calidad. Todos los folletos cumplen su cometido, llegar a los clientes potenciales y despertar a través de pequeñas explicaciones y fotografías el interés por un producto o servicio.